Singular casa señorial en el centro de Capdepera, con una reforma parcial que conserva todo el encanto de su arquitectura histórica. A parte de las zonas de sótano, antiguamente usadas para almacén de productos agropecuarios, entre los que destaca la producción de aceituna y aceite de oliva, esta gran vivienda se estructura en tres plantas, con un total de 6 habitaciones y 3 baños: La planta noble, con una preciosa entrada que mantienen el antiguo pavimento, una habitación en suite que actualmente hace las veces de biblioteca, un amplio salón con chimenea y de techos altos, la cocina office con comedor y chimenea, patio interior que conserva un aire medieval y el acceso a la parte trasera de la casa: con la antigua almazara, establos y almacenes que hoy en día se usan de garaje, zona de juegos, trastero, barbacoa y chimenea, y un patio/jardín que serviría para la construcción de piscina, jardín estilo romántico o huerto urbano. La planta primera, a la que se accede por la antigua escalera abierta a la entrada, o por una zona de servicio situada encima de la antigua almazara, cuenta con dos salas de estar conectadas con amplios ventanales, un baño completo dos habitaciones dobles y una simple, una preciosa terraza con vistas panorámicas hacia el poniente y las montañas cercanas y un trastero/lavandería. Y la parte trasera se estructura en una salita dos terrazas, un grandioso salón diáfano, ideal para construir mas habitaciones o bien un apartamento entero, puesto que las normas urbanísticas de la zona así lo permiten. La planta ático: a la que subimos desde la escalera principal, con un encanto especial, puesto que conserva los ventanucos típicos de la época, y donde se encuentran dos habitaciones dobles, un baño completo y dos salitas que configuran un espacio acogedor, intimo y apacible. Se accede desde la planta ático a una terraza solarium con vistas 360 desde donde se divisa el pueblo, el castillo medieval, las montañas y el campo de los alrededores, toda una experiencia para los sentidos. Toda la casa presenta un muy buen estado de conservación tanto estético como estructural, con vigas de madera originales o restauradas, los suelos originales de pavimento antiguo y las distribuciones originales del espacio que nos hablan de la propia historia de la casa, desde la almazara, los sótanos abovedados hasta los tejados, que cuentan con aislamiento térmico, pero siguen cubiertos de teja islámica, pasando por la fachada, que se mantuvo intacta desde