Lozzo Atestino, masía, terreno y establo. La masía perfecta.
Para nuestra visita guiada encontré un espléndido Jeep militar que pudimos dejar completamente abierto para no perdernos nada del espectáculo natural que nos rodea. ¿Un jeep en el piso? Sí, nuestra visita de hoy es a Lozzo Atesino, en la provincia de Padua, y muchos piensan que este tipo de coches sólo son aptos para la montaña. En realidad estamos en el parque de las Colinas Euganeas y después de la visita está previsto un viaje a las colinas Euganeas con una parada en Abano Terme y una tarde en el spa. Pero centrémonos en la propiedad inmersa en la pintoresca campiña de Padua. Gracias a las condiciones medioambientales, a la fertilidad del suelo, a los bosques ricos en caza y madera y a sus cursos de agua llenos de peces, esta zona se adapta bien a la vida y al cultivo de la vid, que abunda especialmente en estas zonas, de hecho, las masías En los alrededores ya han sido todos renovados y modernizados. El edificio ubicado dentro de una superficie de 4.870 m2, se compone de un edificio principal de tres plantas, donde la planta baja conecta con la cuadra a través de un garaje de más de 70 m2 mientras que las dos plantas se desarrollan sobre una superficie de 180 m2. .m2 cada uno. Dadas las generosas dimensiones y la necesidad de obras de restauración, la masía, además de poder convertirse en residencia principal o convertirse en varios apartamentos, también puede albergar un alojamiento, creando quizás, además de habitaciones temáticas, un exterior con piscina. piscina y zona de relax, zona de barbacoa. Como hemos comentado, la propiedad también cuenta con una cuadra de casi 400 m2 y una nave almacén de casi cien m2 separada del resto. Estas áreas también pueden destinarse a la cría de ganado, a la producción y procesamiento de productos, por ejemplo de la cría de cabras se puede incrementar con la venta de leche, yogur y queso. O se podrían pensar en diferentes animales vinculados al negocio de la hostelería, como caballos con los que organizar excursiones por los alrededores, burros para terapia, ponis para niños y animales de corral para organizar jornadas educativas en la finca para colegios. A poca distancia de las edificaciones, la propiedad consta también de una parcela de regadío de 2,3 hectáreas, de forma rectangular y orientada a la carretera, sin duda representa un gran valor añadido para un posible desarrollo agroturístico de todo el complejo inmobiliario.