Masía Restaurada en el Corazón del Parque Natural de La Garrotxa En el Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa, en Mieres (Girona), se encuentra esta encantadora masía restaurada, un refugio de paz y belleza en pleno corazón de la naturaleza. Situada en una finca de 10 hectáreas, ofrece un entorno privilegiado con vistas espectaculares a los paisajes volcánicos que la rodean, proporcionando la tranquilidad y la serenidad que solo la naturaleza puede ofrecer. La masía principal, con una superficie de 696 m² construidos, ha sido restaurada cuidadosamente, respetando su estilo rústico y autenticidad, pero adaptada a las comodidades modernas. La casa dispone de 7 habitaciones amplias y 4 baños, espaciosas y luminosas, perfectas para el descanso y la comodidad. Las habitaciones, llenas de carácter, están equipadas con calefacción de gasoil, lo que asegura un ambiente cálido durante todo el año. En su interior, además, se encuentra un apartamento independiente, que puede servir para ofrecer mayor privacidad a los propietarios o para alojamiento adicional. La masía incluye también dos anexos que aportan gran versatilidad: - Un antiguo pajar restaurado, que alberga una sala de juegos en su planta superior y un garaje en la planta inferior. - Un taller convertido en pequeño apartamento, ideal como espacio independiente o para actividades diversas. Uno de los encantos adicionales de la propiedad es su deliciosa piscina, perfecta para relajarse y disfrutar de las vistas al paisaje volcánico circundante. Además, la casa cuenta con un porche cubierto, ideal para disfrutar de las cálidas tardes de verano o para cenas al aire libre con amigos y familia, rodeados de naturaleza. La ubicación de esta masía es inmejorable, entre Banyoles y Olot, lo que garantiza una fácil conexión a los servicios básicos del pueblo, al tiempo que mantiene la privacidad y tranquilidad absolutas. Aunque cuenta con algunos vecinos cercanos, la propiedad se encuentra lo suficientemente alejada para garantizar paz y privacidad. Las vistas panorámicas de la finca son impresionantes, con paisajes volcánicos y verdes campos que cambian de color con las estaciones, creando un espectáculo visual único. Este lugar es perfecto para aquellos que buscan desconectar, disfrutar de la naturaleza y vivir en un entorno de total calma, con la comodidad de tener acceso a todo lo que necesitan en las cercanías.